top of page

Rutina de tiro

Actualizado: 12 sept 2020


El reciente cursillo con Paco Rubio me ha hecho pensar en mi rutina de tiro, a ver qué os parece esta rutina larga (muy larga) Suenan dos pitidos, me sitúo en la línea de tiro, pies ligeramente separados en una postura cómoda, situados en una línea imaginaria perpendicular a la línea de tiro, me gusta sentirlos así ningún pie más adelantado que el otro, me ayuda a controlar una buena postura corporal. Pala inferior sobre el pie izquierdo. Suena el tercer pitido, tomo una flecha con calma, despacio, la colocación de la flecha es un ritual. Compruebo posición de pluma maestra, culatín entre los nocks y colocación correcta en el reposaflechas. Ya no necesito mirar más el arco, mirada al frente, es el momento de sentir la posición correcta de todo el cuerpo. Cuerpo erguido, recto, hombros relajados, la pala inferior ya no descansa en el pie izquierdo mano de cuerda en su posición pero relajada. En esta posición giro la cabeza y comienzo a centrar mi atención en la diana, ambos ojos enfocados perfectamente en ese punto amarillo. Comienzo a levantar el arco al mismo tiempo que lo voy tensando, lentamente, compruebo posición de mano de arco, brazo de cuerda con el codo ligeramente levantado, separado del cuerpo. Continuo levantando el arco y el tensado, ni un momento he perdido de vista el punto amarillo. El arco llega a su altura máxima, lo siento correctamente apoyado en la mano de arco, mano relajada. Comienza el anclaje, busco la posición correcta de la mano, siempre en el mismo lugar, la cuerda toca la barbilla, labios y nariz siempre en el mismo lugar, en esta posición no necesito alinear la cuerda visualmente, la vista sigue enfocada en el punto amarillo. Comienza la fase de apuntar, la mira es apenas una sombra desenfocada que se mueve por delante de la diana, trato de colocarla en el centro y parar el movimiento, ambos ojos siguen enfocados en la diana, no enfoco la mira, solo el punto central se ve nítido sobre el amarillo. Es el momento de la autoconfianza, confío plenamente en mi material que tantas veces he utilizado y confío en mí mismo, soy capaz de alcanzar ese amarillo que tantas veces he conseguido. Máxima concentración dos palabras resuenan en mi mente: Fuerte y Preciso, mientras escucho esas palabras no pienso en otra cosa. Ahí está, es el momento tenso un poco más los músculos de la espalda, evitando moverme lo más mínimo. Salta el clicker, los dedos de la mano de cuerda se relajan automáticamente, en ese instante ya sé dónde va la flecha, puedo cerrar los ojos o apartar la mirada, la autoconfianza y la correcta ejecución de todo el rito anterior ya han sentenciado el punto donde impactará la flecha, la mano de cuerda se ha movido apenas una caricia hacia la nuca, el arco se balancea en su lugar sujeto por la dragonera, no muevo un musculo hasta el impacto de la flecha, esa flecha ya ha pasado, no necesito ni mirarla, es el momento de comenzar el ritual con la siguiente flecha. Manuel Pérez


 
 
 

Entradas recientes

Ver todo
Nueva versión cortadora de plumas

Actualmente está mejorada, tiene un control de potencia para calentar más o menos el hilo y en proyecto convertirla en cortadora de foam...

 
 
 

Comments


Publicar: Blog2_Post

©2020 por Manuel Pérez Vela. Creada con Wix.com

bottom of page